Plantas comestibles para el jardín: belleza y funcionalidad en un mismo espacio
14 noviembre, 2025Costa Rica es un país donde la naturaleza nunca deja de sorprender. Entre sus tesoros más impresionantes se encuentra el Río Celeste, famoso por su tonalidad turquesa única, y las cavernas escondidas que guardan historias geológicas y culturales fascinantes. Ambos destinos ofrecen experiencias inolvidables para quienes desean ir más allá de los lugares turísticos convencionales.
El enigma del Río Celeste
Ubicado en el Parque Nacional Volcán Tenorio, el Río Celeste es célebre por el intenso color azul de sus aguas, resultado de una reacción natural entre minerales volcánicos. A lo largo de su recorrido encontrará cascadas imponentes, senderos rodeados de selva tropical y miradores que invitan a detenerse y contemplar el paisaje.
- Acceso: se llega desde Bijagua de Upala, con caminatas de dificultad moderada.
- Consejo práctico: lleve zapatos cerrados, ya que los senderos suelen ser resbaladizos, y vaya temprano para evitar aglomeraciones.
Cavernas ocultas en Costa Rica
Además de ríos y montañas, Costa Rica guarda en su interior un mundo subterráneo lleno de misterio. Un ejemplo son las Cavernas de Barra Honda, en Guanacaste, donde se pueden observar estalactitas y estalagmitas formadas durante miles de años.
- Acceso: requieren guía certificado y cierta condición física.
- Consejo práctico: lleve linterna frontal y ropa cómoda; la experiencia es segura, pero exige movilidad y precaución.
Una experiencia para los sentidos
Visitar estos destinos no solo significa disfrutar de paisajes imponentes, sino también conectar con la esencia natural de Costa Rica. Desde el rugido del agua cayendo en el Río Celeste hasta el silencio profundo de las cavernas, cada momento le invita a redescubrir la riqueza de nuestro país.
Consejos prácticos adicionales
- Mejor época: en temporada seca (diciembre a abril) el acceso a senderos y cuevas es más fácil.
- Equipo recomendado: repelente, capa ligera para lluvia, hidratación y cámara fotográfica.
- Respeto ambiental: no se permite nadar en el Río Celeste para proteger su ecosistema; siga siempre las indicaciones de los guardaparques.
Explorar el Río Celeste y las cuevas de Barra Honda es una experiencia que une aventura, misterio y naturaleza en su estado más puro. Dos destinos imprescindibles para quienes buscan ir más allá de lo cotidiano en Costa Rica.








